
por la palabra sexo encadenadas
liban el sahumerio del cuerpo
carnada y anzuelo a su vez
una es el otro
sus flores engullen los hilos de la mano
un alfabeto extenuado de vapor trazan
las espío a través de uno de sus ombligos
hasta que las plegarias ya no son necesarias
Alberto Bueno Rangel -(Colaborador)
1 comment:
y vaya Dos Evas. Este poema, con pocas y sencillas palabras explota en la conciencia de uno. Gracias, número 100. Será el 100 por fin?
Post a Comment