Monday, October 20, 2008

Dos Evas


por la palabra sexo encadenadas
liban el sahumerio del cuerpo

carnada y anzuelo a su vez
una es el otro

sus flores engullen los hilos de la mano
un alfabeto extenuado de vapor trazan

las espío a través de uno de sus ombligos
hasta que las plegarias ya no son necesarias



Alberto Bueno Rangel -(Colaborador)

1 comment:

Mario Morenza I said...

y vaya Dos Evas. Este poema, con pocas y sencillas palabras explota en la conciencia de uno. Gracias, número 100. Será el 100 por fin?